Escribe: Jorge Mario Ovejero. Fisioterapeuta MP 253- DNI 13.693.829.- Andalgalá. Catamarca.
Simplemente con este Título, muy significativo, estoy parafraseando a un trabajo Científico que realizó la Universidad Nacional de Tucumán, cuyo autor el Dr. Teófilo Prado, ha titulado de esta manera, (Médico Especialista en Ortopedia y Traumatología). Yo tomo esta frase con gran preocupación, ya que hoy es una grave situación endémica en nuestra Sociedad de Catamarca y también en Andalgalá.
Todos los días la realidad periodística nos muestra con real crudeza los accidentes de motos, todos son para mí… INCIDENTES, ya que casi todos tienen protagonismo desde la falla Humana, con irresponsabilidad personal en los accidentados.
En mi consultorio de Fisioterapia y Rehabilitación, ya hace muchos años que no tengo una sola semana, sin tener pacientes con graves sucesos de accidentes motociclísticos, todos/as coinciden en que fueron fallas propias por diferentes conceptos: “iba fuerte”, “no frené a tiempo”, “no lo vi bien”, “tenía poca luz”, “pensé que sí llegaba a cruzar”; todas excusas que sólo muestran las faltas de pericia, la falta de responsabilidad en la conducción, la falta de humanidad propia y para con los otros, falta de conocimiento de la Ley de Tránsito Nacional, falta de conocimiento de las Ordenanzas Municipales, desprecio por la vida misma, etc. Muchos conceptos acumulativos para analizar en “segundas partes y tiempos”, pero poco en Fase Pre-Accidental. Para que se entienda: antes de sufrir el Trauma.
Es allí adonde deseo llegar con el mensaje que escribo ahora. debemos saber que el trauma no tiene parámetros de igualdad en el daño, estas son ya consecuencias y derivan todas en cuasi- secuelas dañosas y esto sí está estudiado por la Sociedad del Trauma Argentino e Internacional.
Claro que si hablamos de trauma, hablamos de daño, hablamos de dolor, de riesgo de muerte, de muerte, de graves problemas personales, de graves problemas familiares, de traslados urgentes a Hospitales centrales, de compromisos económicos, de gastos no previstos, sacar créditos no pensados, de complicaciones propias del Síndrome del trauma o del poli-trauma ( infecciones, amputaciones, cirugías de rescates, secuelas en lo inmediato y en lo mediato, incapacidades transitorias y permanentes, pérdidas de días laborales( ILT), trastornos biomecánicos, trastornos fisiológicos, trastornos psicológicos y psiquiátricos), a esto se suma que las familias salen a buscar recursos económicos de urgencia y convocan a realizar rifas, bingos, vender comidas, torneos deportivos para conseguir recursos y beneficios, van a todos los lugares Institucionales y Políticos habidos y por haber, radios y TV. Nada que no conozcamos para conseguir la “Bendita Prótesis”. Así le dice la gente en lo vulgar, pero son implantes u osteosíntesis para solucionar graves fracturas con pérdidas oseas y tejidos nobles en su mayoría.
Ahora bien: siempre lo mismo, tenemos que actuar sobre lo ya acaecido, sobre lo que ya fue, y parece que nadie de los que usan motos, piensan en prevención, nadie piensa, parece, en evitar los accidentes por la vía pública, por esa misma vía pública que es de todos, no tan sólo es para los motociclistas que se adueñan irresponsablemente de ella, o sea las calles y avenidas, también rutas.
Vemos a diario, motos sin luz, motos sin frenos, motos sin caños de escapes lícitos y adecuados a sus cilindradas de fábricas. Claro, el ruidito es lindo y es fachero. No señor, esto es ilícito, ilegal, esto es nocivo para la salud social y urbana, con el ruido al carajo y multa con retención de las motos, hasta que se pongan en regla. Vemos motos con excesos de ocupantes en claro riesgo, sin cascos sin papeles, sin seguros, etc. Y todavía “algunos”, con niveles de alcohol en sangre. El Combo perfecto para que el trauma esté en puerta y que ocurra a diario y en todo momento.
Pero señores motociclistas, ustedes están hipotecando la Salud Pública y Privada, así no hay sistema de Salud que aguante, no hay presupuestos para las estupideces irresponsables, los accidentes de motos están “comiendo” los balances económicos antes de tiempos, aquellos que están determinados para otras razones de Salud, como ser: vacunas, enfermedades infanto- juveniles, embarazos, partos y cirugías programadas, stcoks de Remedios para el cáncer, oftalmología hospitalaria, hematología, ortopedia, fisiatría y rehabilitación, etc. Hoy la realidad nos muestra que el trauma por motos se lleva el 60% del presupuesto de Salud. Si, es una barbaridad y esa “carga hereditaria” luego es de nuestra sociedad, de la cual yo particularmente, estoy en contra de las motos , donde no conozco a nadie que tenga una moto, que no le haya ocurrido algo en su Salud, arriba de estos bólidos.