Tres policías de la provincia de Río Negro fueron condenados a prisión perpetua por la tortura seguida de muerte del detenido Jorge Gatica en la Comisaría N°45 de Cipolletti en enero de 2023. Walter Carrizo, Jorge Luciano Sosa y Vilmar Quintrel fueron sentenciados a la pena máxima de prisión por torturar y matar a Gatica mientras se encontraba esposado.
Los efectivos ya habían sido hallados culpables a fines de mayo y en la audiencia de cesura, desarrollada días atrás, se dieron a conocer los montos de las penas. Andrea Henríquez, también integrante de esa dependencia, también llegó a juicio, pero en esta ocasión fue condenada a cuatro años y seis meses de cárcel por “no haber intervenido para evitar el ataque, a pesar de su rol jerárquico”. La pena prevé también la inhabilitación absoluta y perpetua para ocupar cargos públicos de los cuatro acusados.
El fiscal jefe Santiago Marquez Gauna había solicitado la pena máxima posible para los tres varones, ya que se trata de un delito cuya única sanción prevista en el Código Penal es la prisión perpetua. La querella adhirió y las defensas no se opusieron, por lo que el juez técnico Marcelo Gómez resolvió que los tres continúen cumpliendo prisión preventiva hasta que la condena quede firme.
El juicio oral y público se realizó entre el 12 y el 22 de mayo en la ciudad de Cipolletti. Declararon 61 testigos y se incorporaron pericias forenses, registros fílmicos, fotografías y documentos. El último día de debate el jurado popular, integrado por seis mujeres y seis varones, deliberó varias horas hasta alcanzar el veredicto unánime de culpabilidad para los cuatro imputados.
De acuerdo con la acusación, Gatica fue brutalmente agredido por los tres policías varones con puños, patadas, rodillazos y elementos romos mientras se encontraba esposado y bajo custodia. La autopsia reveló que sufrió 184 lesiones y una hemorragia interna que le provocó la muerte. Henríquez presenció el ataque sin intervenir y, en lugar de frenarlo, optó por cambiar al guardia a cargo de vigilar a la víctima, medida que resultó ineficaz.
En esta caso ya había un condenado. Se trata del policía Gastón Moraga, quien aquella noche cumplía funciones como oficial a cargo de dicha comisaría. En 2023 fue juzgado en un proceso separado donde admitió no haber controlado ni evitado las agresiones propinadas a Gatica por parte de Henríquez, Carrizo, Sosa y Quintrel. El Ministerio Público Fiscal reformuló la imputación y acordó con todas las partes una pena de tres años de prisión de ejecución condicional, inhabilitación perpetua para ejercer funciones policiales y reglas de conducta por el mismo plazo.
