Tras una reunión convocada por Mauricio Macri, el PRO decidió apoyar el veto que firmó Javier Milei a la ley de financiamiento de las universidades, según pudo confirmar Infobae esta tarde. Pasadas las 14.30, el espacio difundió un comunicado oficial en el que se explicó las razones de esa decisión, que vuelve a poner en sintonía al sector liderado por el ex presidente con La Libertad Avanza.
No obstante, el texto incluyó una crítica directa a la administración de Milei, reiterando los reproches que Macri ya había realizado por el desempeño del Poder Ejecutivo. “Habiendo pasado diez meses de gestión el gobierno se encuentra en un conflicto agravado por cuestiones internas del propio gobierno, conflicto que con una gestión profesional y eficiente se podría haber evitado. Como siempre hemos señalado, para el PRO la gestión importa”, afirma el mensaje.
Al margen del cruce, el acompañamiento del PRO se trata de una decisión clave para reunir los cerca de 85 a 87 votos -de acuerdo al total de diputados presentes- que el oficialismo necesita para impedir que la Cámara baja rechace con dos tercios la decisión del jefe de Estado e insista con la norma original.
El bloque del PRO en la Cámara de Diputados tenía miradas divergentes, que quedaron expuestas durante el fin de semana. El ex presidente buscó ordenar las diversas opiniones de cara a la sesión convocada para el miércoles próximo.
Macri mantuvo una reunión por Zoom con Cristian Ritondo, María Eugenia Vidal y Diego Santilli. También con Facundo Pérez Carletti, secretario general del partido, y Fernando De Andreis, dirigente y principal estratega del macrismo, y otros líderes del partido. Si bien se analizó dar “vía libre” para que cada legislador opte por votar como considere, finalmente se impuso la decisión mayoritaria de continuar apoyando al gobierno.
Macri sorprendió ayer por la mañana con un extenso posteo en X. “La defensa de la universidad pública, su acceso libre, gratuito y democrático, requiere poner fin al uso político de los recursos universitarios”, lanzó y agregó que “la UBA enfrenta una crisis de transparencia” y que “desde 2015 no ha presentado ni una sola factura”. Si bien la publicación dejó entre líneas una especie de guiño hacia el Gobierno, no explicitó su postura.