La querella cuestionó la declaración de Matías Heredia (20), el sospechoso de haber asesinado a Rubén Maturano Olmos (40) en el motel “Oasis”.
El abogado querellante, Gabriel Romero, consideró que la ampliación de la declaración como imputado de Heredia fue “un libreto” que no está sustentado con pruebas en el expediente. Además, advirtió que podría surgir otro agravante en la causa.
Romero representa a la familia Maturano Olmos, y dijo que la versión de los hechos que dio Heredia “fue un libreto, fue prácticamente sacada de película la historia que él cuenta. Él había dicho y ha manifestado que fue abusado sexualmente por parte de la víctima. Y las pruebas dicen lo contrario. Entonces, a partir de ahí, creemos y estamos asegurando que el descargo que él hace en su declaración nada tiene que ver con la verdad real. Creemos y sostenemos que la caratula, la imputación y la calificación que ha defendido tanto la querella como el fiscal Palacios es el camino para el descubrimiento real de la verdad”.
Romero calificó como “medio agarrado de los pelos” la postura de Heredia de abstenerse de declarar en la primera oportunidad, y de hacerlo luego con un “libreto”. “Lo ha hecho con la manera de un libreto textual, prácticamente estudiado, manejado. Esa historia se la puede creer únicamente el imputado y no sé si la defensa. Nosotros, al contrario, hemos valorado más que todo las pruebas que apuntalan y nos dicen que la muerte de Rubén Maturano Olmos fue en un marco de que se ha matado sobre seguro. Hubo una alevosía en el crimen. Y también el homicidio habla sobre el criminis causa”.
Romero amplió su concepto señalando que “investigando más, puede darse otro agravante”. ¿Cuál? El odio. La querella no descarta que Maturano Olmos haya sido asesinado por su orientación sexual. “Hay algunos patrones que llevan a pensar que el homicidio también se hizo en otro contexto, respecto al odio”, indicó.