El reciente crimen de Kim Gómez, la niña de 7 años que fue asesinada en manos de dos adolescentes menores de edad, generó un revuelo no solo social sino también político. Tal es así que, Alberto Castillo , el referente del nuevo espacio Frente Liberal Salteño, volvió a poner en agenda pública la necesidad de comenzar a discutir la pena de muerte, dirigiéndose firmemente al presidente Javier Milei .
“Señor presidente, usted que es un restaurador de las instituciones de este país, es necesario empezar a discutir la pena de muerte para los asesinos de niños” , escribió el presidente de REMSa (Recursos Energéticos y Mineros de Salta) en su cuenta oficial X (ex Twitter). Para ello, justificó su postura haciendo referencia a las falencias de las políticas criminales e investigativas que arrastran al país hace más de tres décadas.
“Quizás esta era una muerte evitable, porque uno de los asesinos había estado preso hace semanas y fue liberado”, exclamó Castillo haciendo foco en el alto nivel de reincidencia en hechos delictivos de los delincuentes. No obstante, la sensibilidad social está latente dada la joven edad de los asesinos que le arrebataron la vida a Kim.
A modo de cierre, el contundente mensaje de Alberto Castillo terminó con una frase que se convirtió en lema en los próximos días: “No más casos Kim en nuestro país”. Pese a que este terrible caso se volvió a poner en foco a las políticas de reinserción de los institutos de menores, el rol de la justicia y los fiscales y la grave situación de vulnerabilidad social -donde el factor denominador es el avance de la drogadicción y el narcotráfico en los barrios-, el dirigente libertario expresó a viva voz una solución “factible” para condenar a aquellos que cometieron crímenes inadmisibles.
Teniendo en cuenta que este 2025 es un año electoral donde se renovarán autoridades en los parlamentos nacionales, provinciales y municipales, la necesidad del compromiso de los candidatos en las necesidades imperiosas de los ciudadanos es urgente. El llamado de Castillo no sólo va referido a la máxima autoridad del Estado argentino, sino que también a los colegas del bloque que representan ya sus pares políticos.
