En un importante operativo desplegado durante la siesta de ayer jueves en pleno Centro de la ciudad de Santiago del Estero, personal de la Dirección General de Drogas Peligrosas de la Policía de la Provincia logró la detención de tres sujetos y el secuestro de un cargamento de 33,24 kilogramos de cocaína, con un valor estimado de $ 300 millones de pesos. Además de elementos de comunicación, armas y rodados.
El procedimiento se realizó a las 13.20 aproximadamente, en la intersección de las avenidas Pedro León Gallo y Moreno, donde fueron detenidos Lucas Gabriel Vizgarra Fuentes, de 25 años, con domicilio en el barrio 40 Viviendas de Monte Quemado, quien fue identificado como funcionario policial.
También Gonzalo Exequiel Mercado (24), domiciliado en calle Primera Junta 450 del barrio Centro de Monte Quemado, y Juan Eduardo Guerrero (39), con domicilio en Torre 51, P1 del barrio Autonomía de la ciudad Capital.
El operativo fue llevado adelante en el marco de una investigación que se encuentra en curso por parte de la Dirección de Drogas Peligrosas, con intervención del Juzgado Federal N° 2, a cargo de Sebastián Argibay.
Las detenciones se produjeron cuando Vizgarra, junto con Mercado como conductor, llegó a la mencionada esquina en un automóvil Chevrolet Onix color gris, dominio AB857FO.
Estacionaron sobre Av. Moreno (sentido norte/sur), para luego descender y entrevistarse con el Juan Eduardo Guerrero, quien ya se encontraba a la espera en el lugar y abrió inmediatamente las puertas de una camioneta Ford Ranger Azul, dominio AD403HH, para realizar el traspaso de cajas que habían sido transportadas en el vehículo menor.
Tras concretarse la detención, el personal policial realizó una requisa mediante el empleo de scaner y perros antinarcóticos, lo que permitió dar con 24 ladrillos rectangulares compactos de color amarillo, un cuchillo y un revólver calibre 22 con 7 cartuchos en el tambor.
La prueba de campo realizada de la sustancia secuestrada permitió confirmar la sospecha de los investigadores sobre el cargamento de cocaína que se encontraba distribuida en ladrillos que presentaban en cada paquete sellos de delfín.
