Es el verdadero partido de partidos, capaz de conmover al futbolero de ley, y se disputará en Catamarca, con un club de Santiago del Estero y otro de Salta jugándose un ascenso en 90 minutos, a todo o nada. Y no es un torneo más.
El Federal A, ese campeonato que representa a la tercera categoría del fútbol argentino y está teñido por la pasión pero también por las sospechas, define su primer ascenso con una finalísima entre Sarmiento de La Banda, el Profesor santiagueño, y Central Norte, el Cuervo salteño, dos instituciones centenarias que este año ya tuvieron un cruce escandaloso y este domingo a las 18 horas buscarán llegar a la Primera Nacional.
Para Sarmiento será una oportunidad inédita porque salvo un lejano recuerdo en el Torneo Regional en 1982 (la antesala de los viejos Nacionales de Primera División), nunca estuvo tan cerca de la gloria: es la primera temporada que juega el Federal A tras 16 años en las distintas variantes del Federal B y 6 en el Torneo del Interior, el cuarto y quinto peldaño en los estamentos de la AFA.
En Salta, en cambio, hay sed de revancha. El Azabache jugó Nacionales en los años setenta y ochenta, ganándole a equipos de la talla de Argentinos Juniors, Newell’s y Colón, en noviembre de 1976 jugó en La Paternal ante un tal Diego Maradona, y en 1982 logró la mejor victoria de su historia, un 2-1 frente al Boca que había sido campeón el año anterior. Esa era dorada se apagó en 1986: Central Norte se clasificó a la primera edición de la llamada Primera B Nacional pero terminó descendiendo tras un discutido triangular de desempate. Luego llegó el ostracismo, con crisis económicas y deportivas constantes. Hasta esta nueva cita con el destino.
El choque será en el estadio Bicentenario Ciudad de Catamarca, un escenario rodeado de un marco natural fabuloso, con capacidad para 25 mil personas e inaugurado en 2010, y que supo recibir las finales de la Supercopa Argentina 2012 y la Copa Argentina 2013, ambas ganadas por Arsenal de Sarandí (ante Boca y San Lorenzo), entre otros duelos. Tuvo que cerrarse en 2016 por “fallas estructurales” y se reabrió tras varios años de abandono en 2022, gracias al apoyo del gobierno y el aporte de capitales privados. Dicen que nunca se respiró la atmósfera de estos días.
Cada parcialidad tendrá 9 mil entradas, repartidas entre 6 mil populares y 3 mil plateas. Se esperan rutas colapsadas, controles policiales en todas las intersecciones y un operativo policial como si se jugara un Superclásico, en términos de proporciones.
“La gente que no consiga entradas que no vaya porque la va a pasar mal”, avisó el presidente de Central Norte, Leandro Etchezar, consciente de que serán muchos los salteños que se animarán a recorrer los 530 kilómetros de distancia a pesar de que no tener su ticket. También se expresó preocupado por si se produce algún cruce entre las hinchadas: “Tanto nosotros como los de Santiago del Estero vamos a entrar a la ciudad por el mismo lado”.
La violencia es un flagelo constante en el Federal A, como en todo el fútbol argentino, y el caso más resonante este año fueron las amenazas de muerte a la presidenta del Club Cipoletti de Río Negro, Mónica del Río, quien recibió un mensaje “invitándola” a irse del club junto a seis balas, una para cada integrante de su familia.
El torneo fue noticia por ese episodio pero también por los escándalos y las sospechas generadas a partir de las apuestas deportivas, una mancha que alcanzó al club Círculo Deportivo de Nicanor Otamendi, localidad cercana a Mar del Plata, y que provocó la salida de un DT en medio del certamen.
Lo mismo sucede con las ayudas arbitrales, con videos que suelen ser tendencia de las redes sociales semana tras semana, y que terminan teniendo muchísima más repercusión que las alternativas deportivas de cada jornada. Los dirigentes no hacen mucho para evitarlo.
Central Norte y Sarmiento llegan a la final de este domingo con un antecedente muy caliente, en julio. El partido correspondiente a la segunda fase clasificatoria a los playoffs se jugó en el estadio Padre Martearena de la capital salteña y tuvo que ser suspendido cuando el local ganaba 2-0. Una gresca en el banco de suplentes derivó en proyectiles lanzados desde la platea y un jugador de la visita terminó en el piso, supuestamente con un corte. Luego se supo que lo habían rociado con Pervinox para simular que tenía sangre, con la intención de reclamar los puntos. El Tribunal de Disciplina no cayó en la trampa.
Pablo Martel, DT de Sarmiento, aparece en un video pidiéndole a su jugador que se meta dentro de la cancha y se arroje al suelo. Señalado en Salta por ser muy cercano al tesorero de la AFA, el santiagueño Pablo Toviggino, Martel se expresa en las redes sociales con la misma locuacidad que el hombre de mayor confianza de Claudio Chiqui Tapia.
“Acordate de llevar pervinox, payaso”, lo chicaneó un hincha. “Llevo para tu cola juguetona?”, le respondió el entrenador.
En caso de que Sarmiento logre llegar a la Primera Nacional, se sumará a la larga lista de clubes santiagueños que lograron ascender desde la llegada de Toviggino al Consejo Federal de la AFA, con Central Córdoba, Güemes y Mitre a la cabeza, pero sin obviar a Vélez de San Ramón, Independiente de Fernández y Comercio Central Unidos, entre otros, que lo han hecho en las categorías inferiores.
Para los salteños será la oportunidad de llegar a una categoría que ya tiene un representante de esa provincia, Gimnasia y Tiro, casualmente el último campeón del Federal A.
Para el perdedor quedará el consuelo de la Reválida, una instancia donde habrá otros quince equipos y que determinará a un clasificado al Reducido de la Primera B, en busca del segundo ascenso, con más partidos pero también más polémicas y sospechas.