Catamarca: reclamo de docentes en la escuela 450 de Laguna Blanca

Luego del temporal de viento de la semana pasada, los docentes de la escuela de Laguna Blanca, Departamento Belén, hicieron conocer el siguiente reclamo a través de las redes sociales y de los medios:

“Pedimos atención urgente a las autoridades y a la opinión pública sobre la situación crítica que enfrentan los docentes de nivel inicial y primario en la Escuela 450 de Laguna Blanca Belén, Catamarca. A pesar de las extremas condiciones climáticas, con temperaturas que alcanzan los 12 grados bajo cero durante la noche, se nos exige trabajar presencialmente.
La directora de nivel, no autoriza la modalidad virtual, obligando a los maestros a permanecer en un edificio que se encuentra en un estado deplorable. La escuela está actualmente en obras de reparación del techo, lo que ha dejado las galerías sin puertas ni ventanas, permitiendo el ingreso directo del intenso frío. Además, los trabajos de construcción representan un peligro constante para los docentes y los alumnos con la caída de escombros y el ruido de las herramientas. A esta situación se suma la tragedia personal de muchos de nuestros colegas. A raíz del reciente temporal que afectó la zona hace dos semanas, varios docentes perdieron parte de los techos de sus viviendas de alquiler y ahora se encuentran albergados en refugios. Sin embargo, estos albergues carecen de servicios básicos: no tienen luz, los paneles solares no funcionan y no hay agua caliente, lo que agrava aún más su sufrimiento en medio de las bajas temperaturas. Sostienen que las aulas son “térmicas” por tener doble pared, una afirmación que no tiene en cuenta que la falta de puertas y ventanas hace imposible mantener el calor, y que el riesgo de accidentes debido a las reparaciones es inminente. A pesar de nuestros intentos de diálogo y las peticiones directas al Gobernador de la provincia durante su reciente visita, no hemos obtenido ninguna respuesta o solución.
Nos vemos obligados a asistir a la escuela para entregar material de estudio, pero se nos niega la posibilidad de realizar nuestro trabajo de forma segura y digna. Esta situación no solo afecta a los docentes, sino que también pone en riesgo a los estudiantes si se les obliga a volver a un entorno inseguro. Exigimos que se escuchen nuestras voces y se tomen medidas inmediatas para proteger nuestra integridad y la de nuestros alumnos. La educación no puede darse a costa de nuestra salud y seguridad”.