Una situación crítica se vive en varias localidades de la provincia de Buenos Aires debido al fuerte temporal que azotó la región desde la madrugada del viernes y hasta estas horas del sábado. Las intensas lluvias provocaron graves inundaciones, anegamiento de calles, ingreso de agua en viviendas y la evacuación de decenas de familias. En Zárate y Campana, las precipitaciones superaron los 250 milímetros.
El Servicio Meteorológico Nacional elevó el nivel de alerta de naranja a roja en más de veinte distritos, incluyendo Luján, Exaltación de la Cruz, San Antonio de Areco, Pergamino, Junín y Moreno. Se informó que las tormentas continúan regenerándose, por lo que se esperan varias horas más de lluvias intensas.
Ante la gravedad de la situación, el gobierno bonaerense activó un Comando de Incidencias con base en Puente 12, La Matanza, encabezado por el ministro de Seguridad, Javier Alonso, para coordinar la asistencia a los municipios afectados.
A las 21, se reportaban cortes totales en distintas rutas como la 51, 191, 31 y 32, así como en accesos clave como el de Villa Lía, en San Antonio de Areco. La acumulación de agua y los destrozos por la caída de granizo mantienen en vilo a cientos de familias que aún esperan ayuda.
Las autoridades instan a la población a mantenerse informada y extremar las precauciones.
