Una joven denunció que su exesposo, quien cumple una condena de 8 años por intento de femicidio, la viene amenazando desde el penal desde el 13 de mayo. El caso reveló una grave falla en los controles penitenciarios, ya que el condenado incluso se comunicó con la hermana de la víctima y le dejó un número de celular para que lo contactaran dentro de la unidad carcelaria.
Una estremecedora denuncia volvió a poner en agenda la inseguridad que enfrentan las víctimas de violencia de género, incluso cuando sus agresores están tras las rejas. En este caso, una joven alertó que su exesposo, condenado a 8 años de prisión por intentar matarla, volvió a amenazarla desde la Unidad Penitenciaria de Miraflores.
Los hechos comenzaron el pasado 13 de mayo y se prolongaron hasta ayer. Lo más alarmante es que el condenado se contactó con la hermana de la víctima, a quien le dejó mensajes intimidantes y un número de celular activo, para que se comunicaran con él directamente desde el penal.
La hermana, al recibir el mensaje, advirtió de inmediato a la víctima, quien formalizó la denuncia ante las autoridades. El caso no solo evidencia el sufrimiento constante de la joven, sino también la falta de control dentro del sistema penitenciario, que le permitió al recluso acceder a un teléfono y sostener comunicaciones que están expresamente prohibidas.
Desde el entorno de la víctima se exige la intervención urgente del Poder Judicial y del Servicio Penitenciario, así como la aplicación de medidas estrictas para garantizar la protección de la joven. Organismos de derechos humanos y agrupaciones feministas ya se manifestaron exigiendo una investigación inmediata y sanciones ejemplares.
Fuente: Catamarca en Cana
