Al tomar estado público el abandono en que se encuentra la pileta de la Escuela Hogar N°601, hubo voces que intentaron dar explicaciones.
La directora provincial de Educación Primaria, Mirian Ropellatto, relativizó los dichos de la vicedirectora de la institución escolar, Raquel Vázquez, quien blanqueó la situación de la pileta que permanece sin ser reparada y sin actividad para la presente temporada estival.
La funcionaria provincial resaltó el compromiso e interés del gobernador, Raúl Jalil, y del ministro de Educación, Dalmacio Mera, con la Escuela Hogar, asegurando además que desde el 5 de enero personal trabaja en el establecimiento, dato totalmente erróneo porque nadie se encuentra interviniendo en la escuela.
Además, Ropellatto exhibió un grado de desconocimiento importante sobre el estado de la institución.
Este es el segundo verano que la pileta no funciona ni para los alumnos ni para la comunidad en general por rotura en el sistema de llenado, siendo necesarios, además, una bomba y la recuperación de espacio.
Falta iluminación en el predio deportivo, alambrado perimetral y seguridad para evitar robos y vandalismo, además que no funcionan los lavarropas, la cámara frigorífica y la cocina industrial.
Las mesas y sillas del comedor están obsoletas y tampoco los pequeños tienen un televisor para que aquellos que están internos puedan tener un momento de distracción.
El techo del salón de actos debe ser cambiado ya que tiene filtraciones.
En cuanto al personal, es necesario que se designen ecónomos para que realicen controles de la mercadería de la institución.
Increíblemente, a pesar de que hay más de 200 alumnos de los cuales un centenar son residentes, no hay enfermeras ni médicos para una emergencia, y obligadamente se debe convocar al SAME.
Son algunas de las necesidades y falencias que tiene la Escuela Hogar capitalino. Pero nada se reconoce oficialmente.
Hoy la gestión de Dalmacio Mera al frente del ministerio de Educación hace agua por donde se lo mire: 600 docentes no cobran sus sueldos desde hace más de 6 meses, escuelas con falencias edilicias y otras con espacios abandonados, como este caso.
Cuando las prioridades están distorsionadas se cae en el grosero error de gastar $350 millones de pesos en camionetas de alta gama para uso exclusivo de Mera y sus funcionarios y no en las necesidades de la población vulnerable como nuestros niños.
La vicedirectora, con la voz entrecortada, desnudó una triste realidad mientras que una jerarca de Educación pretendió desacreditar los dichos saliendo en defensa de una gestión que no se caracteriza por su eficiencia.