Comienza un nuevo paro universitario en todo el país

Los gremios definieron una medida de fuerza de 48 horas: denuncian una pérdida de más de 50 puntos frente a la inflación. Los rectores celebraron la media sanción de la ley de financiamiento. Para los docentes de escuela, la Justicia suspendió la restitución del impuesto a las ganancias.

Este martes comienza en todo el país un nuevo paro universitario de 48 horas impulsado por los gremios que integran el Frente Sindical de Universidades Nacionales. La huelga de docentes y no docentes se suma a la medida de fuerza de 72 horas realizada durante la semana pasada, con alto acatamiento en las universidades públicas. Desde los gremios universitarios confirmaron que apuntan a convocar una nueva Marcha Federal Universitaria en la semana del 9 de septiembre.

Fuentes del Frente Sindical dijeron que no hubo avances en el diálogo con el Gobierno nacional tras la medida de fuerza de la semana pasada, que en varias universidades coincidió con el comienzo de segundo cuatrimestre. Desde la Secretaría de Educación informaron que entre diciembre y julio los salarios universitarios tuvieron un aumento del 71%, pero desde los gremios advierten que la inflación acumulada en el mismo período superó el 125% y denuncian una pérdida de poder adquisitivo que ronda el 50% desde que empezó el año.

En la última reunión de la paritaria universitaria, el viernes 9 de agosto, el subsecretario de Políticas Universitarias, Alejandro Álvarez, y su par de Desarrollo y Modernización del Empleo Público, María Rosana Reggi, habían ofrecido a los sindicatos un aumento del 3% para agosto y del 2% para septiembre. La propuesta fue rechazada por los gremios, como venía sucediendo en las reuniones previas. Para buscar acercar posiciones, se creó una “comisión técnica tripartita” integrada por los sindicatos y por representantes de la Secretaría de Educación del Ministerio de Capital Humano y del Ministerio de Desregulación y Transformación del Estado.

En este contexto, la Universidad de Buenos Aires (UBA) lanzó la semana pasada una campaña que pide “salarios dignos para que los profesores puedan estar en las aulas”. Los distintos spots, difundidos en las redes de la Universidad, presentan a docentes trabajando en call centers o como mozos, kiosqueros, conductores de Uber o repartidores de apps de delivery.

“No podemos pedirle a un profesor que siga dando clase con un sueldo que está por debajo de la línea de pobreza. En el transcurso de este año, nuestros salarios perdieron más del 50% de su poder adquisitivo. No tenemos registro en la historia de un gobierno que en tan poco tiempo haya hecho un ajuste tan brutal en la educación superior”, dijo el vicerrector de la UBA, Emiliano Yacobitti.