Como siempre, los fieles devotos de la Madre del Valle se dieron cita para cerrar el Septenario que se celebró desde el pasado sábado.
Las calles céntricas se vieron colmadas de catamarqueños y de peregrinos llegados de todo el interior y de provincias vecinas.
A lo largo de estas celebraciones que comenzaron en abril y culminaron este 4 de mayo, llegaron a sumarse más de 32 mil personas, según información proporcionada por las fuerzas de seguridad.
El recorrido procesional inició por primera vez en la historia de la diócesis en el Paseo La Alameda, paraguardar respeto al tiempo de luto de la Iglesia toda por el reciente fallecimiento del Papa Francisco.
