Brenda Geraldine Díaz Cáceres, una nena de 8 años de edad, había desaparecido de Argentina en junio de 2024. Desde entonces era intensamente buscada. Su imagen fue difundida ampliamente, para alertar a la población por si alguien llegaba a verla o creía reconocerla. Finalmente fue localizada sana y salva: la menor se encontraba con su madre en Paraguay.
Tras vivir una situación crítica de violencia familiar, que no lograba resolver la justicia de su país, la mamá decidió cruzar la frontera. Para evitar que las localizaran, se cambiaron la identidad.
Un año más tarde, tras una exhaustiva investigación, un periodista de Crónica TV las localizó, y pudo entrevistar a la mamá, con la promesa no revelar el lugar donde están. “Nos sentimos seguras aquí en Paraguay”, expresó la mamá de Brenda, en diálogo con Quique Ortiz.
La mujer reveló que debieron salir a escondidas durante el feriado del 25 de mayo del año pasado. Contó que en un primer momento se instalaron en el campo, sin luz ni internet, debido al temor de ser encontradas. Pero al desaparecer sin dejar rastros, se había especulado con la posibilidad de que hubiera sido capturada por la trata de personas.
Según indicó Ortiz, “fue un trabajo de meses, no bajamos los brazos hasta encontrarla porque teníamos el dato”. Y explicó que no de los periodistas de su equipo, que fue viajante en Formosa, conocía bien la zona y fue a investigar en varias oportunidades, hasta poder confirmar que se trataba de la nena desaparecida.
El periodista logró hablar con ella: “Está muy ambientada con lo que está sucediendo. Sabe que no tiene que salir, que no tiene que hablar”. Y destacó que la pasó mal durante mucho tiempo, pero ahora estaba tranquila. “No tenía miedo del lugar a donde iba. Tenía miedo del lugar de donde se había ido.”
Ahora se trabajan conjuntamente las autoridades argentinas con las paraguayas, para determinar los próximos pasos respecto a la guarda y protección de la menor.
