La tormenta ha retomado su fuerza máxima, según reportó el Centro Nacional de Huracanes.
La expansión del campo de viento aumentará el área de impacto, afectando a más personas a lo largo de la costa oeste. Con una presión central de 918 milibares, el ciclón incrementa el riesgo de marejadas ciclónicas significativas, especialmente en las zonas costeras más vulnerables.
El huracán Milton, que ha vuelto a alcanzar la categoría cinco, se encuentra nuevamente en el centro de la atención. Con vientos sostenidos que llegan a los 265 km/h (165 mph), este ciclón es descrito como un “monstruo” por varios meteorólogos. Según la actualización más reciente del Centro Nacional de Huracanes a las 5 p.m., Milton ha consolidado un núcleo interno extremadamente intenso y bien definido. El meteorólogo de Fox Weather, Bryan Norcross, explicó que el incremento en la categoría se debe principalmente a los análisis de las imágenes satelitales más recientes. Destacó que la estructura de Milton, con su característica forma de “donut” en el ojo del huracán, es típica de los ciclones más poderosos, como los de categoría cinco.
Norcross también detalló que el huracán ha alcanzado una presión central mínima de 918 milibares, lo que refleja la inmensa cantidad de energía acumulada en el sistema. Sin embargo, aclaró que una baja presión no siempre se traduce en vientos más intensos, ya que cuando un huracán se expande en tamaño, la energía se distribuye sobre un área mayor. Esta es una de las razones por las que el tamaño de Milton se está expandiendo y su campo de viento es ahora considerablemente mayor que en días anteriores.
El pronóstico indica que Milton seguirá su avance, debilitándose gradualmente mientras se aproxima a la costa de Florida, pero aún se mantendrá como un huracán mayor con vientos cercanos a los 241 km/h (150 mph) cuando impacte la península. Los modelos de predicción globales, como el americano y el europeo, han mostrado ligeras variaciones en la trayectoria, sugiriendo que la tormenta podría desplazarse un poco más hacia el sur o el norte, lo que afectaría las áreas impactadas por el oleaje y las marejadas ciclónicas.
A medida que se acerque a tierra, será clave monitorear hacia dónde se dirige exactamente el centro del huracán, ya que determinará las zonas de mayor impacto y el grado de devastación.