Claudio Exequiel “Peyeyo” Flores y su ex pareja Yésica Reartes están procesados por “homicidio calificado por el uso de arma de fuego en grado de tentativa, en calidad de autor” y “homicidio calificado por el uso de arma de fuego en grado de tentativa, en calidad de partícipe necesaria”, respectivamente, en perjuicio de Cristian Acosta. El ataque ocurrió en julio de 2022 en la zona sur y la causa fue enviada a juicio por jurados.
Según publica un diario de la Capital de Catamarca, Flores estaba detenido en el penal de Miraflores y este viernes la jueza Daniela Barrionuevo dispuso que recupere la libertad porque se venció el plazo de la prisión preventiva. La Fiscalía Penal N°8 a cargo del flamante fiscal de la causa, Juan Manuel Sánchez Ruiz, no solicitó una prórroga o extensión de la medida.
Ante el vencimiento del plazo procesal (ocurrido hace más de una semana), el abogado Pedro Vélez, defensor de “Peyeyo”, solicitó la audiencia porque el expediente del caso estaba en la Oficina de Gestión de Audiencias (OGA) y no se había realizado el sorteo del juez director para el juicio por jurados. Por esta razón hubo que sortear un juez para efectuar la audiencia.
El fiscal de Cámara Alejandro Dalla Lasta salió sorteado para el debate y, al momento de la audiencia, con la jueza Barrionuevo pidió que a Flores se le instale un dispositivo electrónico dual.
La jueza hizo lugar a la solicitud y desde la querella, a cargo de Juan Pablo Morales, advirtieron que como la Provincia no cuenta con suficientes equipos, “Peyeyo” quedó libre sin dispositivo pero con prohibiciones de acercamiento hacia la víctima, entre otras medidas dispuestas por la jueza.
Recordaron además que el sospechoso estuvo prófugo y que el otorgamiento de la libertad, con la posibilidad de una condena importante, amplía el riesgo procesal.
Por su parte, Vélez informó que estuvo de acuerdo con la colocación del dispositivo por un plazo de 120 días, “para que se pueda demostrar que mi defendido no tuvo contacto con la supuesta víctima”.
“No puede ser que este hombre quede libre. Mi hermano no es un santo pero él (Flores) fue a matar y no sé cómo vamos a reaccionar si lo vemos en la calle. Es muy, pero muy raro lo que pasa. Entra y sale así nomás a días de ir a juicio”, dijeron desde el entorno familiar de Acosta.
Consideraron también que la instrucción de la causa se demoró mucho a pesar de que se contó con registros de videos y varios testimonios.
“¿Cómo puede ser que a dos años esté libre? Cristian (víctima) quedó con graves secuelas y hasta le salió una hernia que habrá que ver si se puede operar. No entendemos qué están buscando desde a Justicia, qué están queriendo hacer. No nos vamos a quedar esperando”, agregaron.
Según la pesquisa (a cargo inicialmente del fiscal Sebastián Pelisari que elevó la causa a juicio), el 19 de julio entre las 12.30 y las 13 aproximadamente, a bordo de una moto Honda CG 150, Flores como acompañante junto a su pareja Reartes que conducía, se presentaron en calle Primero de Mayo al 1200. Flores descendió de la moto -que quedó al cuidado de Reartes-, y empuñando una pistola 9 milímetros entró en una obra en construcción donde Acosta se encontraba trabajando como albañil.
“Peyeyo” increpó a la víctima, quien corrió hacia la parte trasera del predio en busca de refugio pero fue alcanzado por Flores, quien le descerrajó tres disparos para luego huir en la moto que conducía su pareja.
Acosta -conocido como “El Tuerto Godoy”, quedó gravemente herido, tendido en el suelo. Uno de los balazos ingresó por la espalda y salió por la zona torácica.
Poco después fue trasladado al hospital, donde permaneció internado en estado reservado, y luego de varios meses de cuidados fue dado de alta.
Flores abandonó la moto en la que huyó en casa de una familiar de su pareja en Banda de Varela y se ocultó, mientras que Reartes se entregó 48 horas después del ataque.
La Justicia ordenó su detención, que se concretó recién siete meses después, y luego de una veintena de allanamientos.
Fue reducido el 17 de febrero de 2023 cuando efectivos de las divisiones de Homicidios, de Investigaciones y de grupos especiales efectuaron un descomunal operativo en inmediaciones del Mercado de Abasto y lo cercaron y detuvieron en un inmueble de avenida Juan Chelemín al 1500.
“Peyeyo” ostenta un denso historial delictivo con causas por robo doblemente agravado, lesiones y amenazas, encubrimiento, estafas, tenencia y comercialización de estupefacientes. En algunas de esas causas resultó sobreseído.
Con 33 años, Flores ya tenía en su prontuario: 08/07/2004 (robo) Capital; 01/07/2005 (lesiones leves y amenazas) Capital; 31/08/2005 (estupefacientes) ley N° 23737 – Capital (causa sobreseída); 09/03/2006 (hurto) Capital; 22/04/06 (estafa en calidad de coautor) Valle Viejo (causa sobreseída); 12/05/2006 (hurto agravado por escalamiento) Capital; 18/05/2006 (hurto por escalamiento) Capital; 05/06/2006 (abuso de arma en concurso real de dos hechos) Capital; 13/08/2008 (encubrimiento por haber sido cometido con ánimo de lucro en grado de tentativa) Valle Viejo; 20/08/08 (robo en poblado o banda) Capital; 02/12/2009 (Estupefacientes) ley N° 23737 Capital.
En 12/01/2011 tuvo (lesiones graves) Capital; 15/07/2011 (estupefacientes) ley N° 23737 Capital; 27/06/2016 (robo doblemente agravado por haber cometido mediante escalamiento y con el uso de arma de fuego) Capital; 24/05/2019 (hurto simple en calidad de autor) Capital; 28/12/2019 (robo calificado por ser cometido en poblado o banda en grado de tentativa en calidad de coautores) Capital.
