El juez federal Miguel Ángel Contreras rechazó el pedido de prisión domiciliaria solicitado por Edgar Bacchiani en diciembre del año.
El trader lo había fundamentado en la necesidad de cuidar y asistir económicamente a sus dos hijos menores de edad y su madre jubilada.
El Juez basó la decisión en la prórroga de prisión preventiva que vence en abril de este año, convalidada por la Cámara Federal de Apelaciones de Tucumán, y en el peligro de fuga existente en este caso debido al procesamiento por estafa, intermediación financiera no autorizada, lavado de activos y asociación ilícita que pesa sobre Bacchiani.
Contreras expuso que el trader deberá enfrentar un juicio oral en la Justicia de Córdoba que podría someterlo a una pena de “una magnitud importante” y esta situación puede “significar sin lugar a dudas un motivo suficiente y humanamente comprensible para sustraerse del accionar jurisdiccional”.
El factor económico fue también contemplado por el magistrado a la hora de denegar el pedido, entendiendo que el procesado cuenta con los fondos suficientes para eludir la ley en caso de querer hacerlo, debido a “importantes movimientos de activos en cuentas de criptomonedas del mismo, como así también los montos de dinero involucrados en las maniobras delictivas sindicadas”.
Además, dijo que tiene una red de contactos en el país y el extranjero, en base a información obtenida de las pericias en los teléfonos secuestrados, “que podrían colaborar con su incomparecencia en el proceso”.
Asimismo, explicó que aún se investiga dónde se encuentran los activos digitales y criptomonedas que posee y que el hecho de otorgarle la prisión domiciliaria podría dificultar la tarea si lograra acceder a dispositivos informáticos y a internet.
Contreras aseguró también que el dueño de Adhemar Capital S.R.L. no declaró la real cantidad de fondos con los que contaba y “no colabora con el proceso y que la posibilidad de estar fuera del Servicio Penitenciario Provincial podría tener como consecuencia mayores maniobras dilatorias en el trámite de la causa, como el ocultamiento de la totalidad de sus bienes”.
La Fiscalía Federal acompañó el pedido de Bacchiani por “razones humanitarias”, mientras que la querella lo había rechazado por “grave riesgo procesal”.
Finalmente, el Juez dijo que los hijos del procesado reciben las atenciones necesarias de sus progenitoras, Sofía Piña y Zaraive Celeste Garcés Rusa, ex parejas de Bacchiani, también procesadas en la misma causa pero que enfrentan el juicio en libertad.
También argumentó que la madre del trader tiene ingresos propios y otra hija que puede cuidarla en caso de ser necesario.
