En Tucumán y en Entre Ríos: atrapan a acusados de matar a escopetazos a dos jóvenes

Carlos Alberto Risso Patrón, principal sospechoso del homicidio en Santiago del Estero de “Paco” Farías y del intento de asesinato de Lautaro Prado, fue detenido en Tucumán luego de permanecer más de dos semanas prófugo. El arresto se produjo mientras caminaba por la vía pública en la intersección de avenida Roca y 9 de Julio, vestido con ropa deportiva.

El crimen ocurrió el pasado 29 de abril en un campo del paraje Vinal Pozo, Departamento Pellegrini, a 10 kilómetros de Nueva Esperanza, Santiago del Estero. Según los primeros informes, un hombre abrió fuego con una escopeta contra un grupo de personas que recolectaban leña. Farías murió en el acto, mientras que Prado, un joven de 19 años, resultó gravemente herido. El atacante escapó por una zona montuosa y desde entonces era intensamente buscado.

La investigación, dirigida por los fiscales santiagueños Norma Matach y Miguel Torresi, contó con la participación del Departamento de Homicidios y Delitos Complejos, en coordinación con la División de Análisis de la Conducta y Perfilación Criminal. A lo largo de varios días, se desplegaron drones, perros rastreadores y múltiples operativos sin éxito.

Una pista clave indicó que Risso Patrón se habría refugiado en Tucumán con la ayuda de familiares. Gracias a un trabajo conjunto de las autoridades santiagueñas con la policía tucumana, fue finalmente capturado este miércoles.

La policía informó que el detenido ya contaba con antecedentes por tentativa de homicidio en 2020. Permanecía bajo custodia en Tucumán, a la espera de ser trasladado a Santiago del Estero para enfrentar los cargos por homicidio e intento de homicidio.

Un caso similar de homicidio cometido con una escopeta, ocurrió hace pocas horas en Hernandarias, provincia de Entre Ríos, donde detuvieron a Facundo Arrúa, de 22 años, principal sospechoso por el crimen de Patricio Gabriel Arredondo (foto), ocurrido en la madrugada de ayer sábado. El joven asesinado tenía 23 años y recibió un escopetazo durante una discusión.

La aprehensión se produjo este domingo al mediodía tras un intenso rastrillaje en una zona de montes. “Estaba oculto y cuando salió, quizás por hambre u otro motivo, logramos capturarlo sin que opusiera resistencia”, confirmó el jefe de la División Homicidios, comisario Miguel Delavalle.

El hecho de sangre se originó pasada la medianoche del sábado, en una zona de calles de tierra entre Eva Perón y Córdoba. Allí, un grupo de jóvenes se encontraba reunido compartiendo bebidas cuando Arrúa se sumó al encuentro.

Un cruce de miradas con Arredondo –con quien mantenía viejas tensiones– habría desatado una discusión que terminó con un golpe de puño por parte de la víctima. Tras ello, ambos se retiraron del lugar, pero la calma duró poco.

Testigos indicaron que Arrúa regresó minutos más tarde con un machete colgado de la cintura y una escopeta en las manos, preguntando por “Chocho”, el apodo con el que conocían a Arredondo. Pese a los intentos de los presentes por calmarlo, efectuó un disparo que terminó con la vida del joven.

Detuvieron al sospechoso del crimen en Hernandarias (foto Policía de Entre Ríos)
Detuvieron al sospechoso del crimen en Hernandarias (foto Policía de Entre Ríos)

Cuando la Policía arribó al lugar alertada por los vecinos, halló el cuerpo sin vida de la víctima. La investigación quedó a cargo del fiscal Gonzalo Badano. La Policía Científica trabajó en la escena y se recabaron varios testimonios clave.