En la Cámara Penal número uno se realizó esta mañana de viernes la audiencia de cesura en contra del policía Franco Ávalos, que recordemos fue declarado culpable por un jurado popular a principios de esta semana por la muerte de su compañero de trabajo, Oscar Ramírez.
El fiscal Alejandro Dalla Lastra, había solicitado la pena de cinco años de prisión y diez años de inhabilitación. Cinco años es la máxima pena que prevé el delito de homicidio culposo por el cual fue declarado culpable Ávalos, y el máximo que tiene la pena del delito, entendiendo que no se trató de un hecho menor, argumentó el fiscal, que no fue un accidente la muerte de Ramírez, tal como lo quería pasar o representar la defensa, y que Ávalos debía responder por este grave hecho.
Dalla Lasta Hizo mención también a que Ávalos era una persona preparada, tiene un buen promedio cuando era efectivo policial y estaba designado como licenciado de seguridad pública, y además de pedir la inhabilitación para que Ávalos no pueda continuar en la fuerza de seguridad provincial, ni nacional, y tampoco municipal, pidió que se le impida poder ejercer la docencia en cuanto a la enseñanza del manejo de armas de fuego.
Luego alegó la defensa de Ávalos, el abogado Roberto Mazzuco, y pidió la pena de tres años de prisión. No aclaró si debería ser en suspenso o efectiva, teniendo en cuenta que el delito de homicidio culposo prevé la pena de tres años de prisión en suspenso, pero hay que recordar que Ávalos el pasado 2 de junio ya cumplió dos años de prisión preventiva en el servicio penitenciario.
El juez director del proceso, el doctor Fernando Esteban, pasó a un cuarto intermedio y pasadas las 10 de esta mañana sentenció a cuatro años de prisión efectiva a Ávalos, quien será trasladado al Servicio Penitenciario Provincial.