Una sorpresiva medida del PAMI generó conmoción en Salta: el cierre de su servicio en el Hospital Militar a partir del 1 de agosto. La decisión, comunicada a través de una carta documento, dejó en la incertidumbre a unos 17.000 afiliados y puso en riesgo la continuidad laboral de un centenar de trabajadores de la empresa prestadora, Tisec S.R.L.
Según denunció Diego Riservato, coordinador general de la sala de internados y la guardia del Hospital Militar, la medida fue tomada de manera unilateral por PAMI desde Buenos Aires, sin previo aviso ni diálogo con el personal ni con los pacientes afectados. Esta falta de comunicación produjo un profundo malestar y preocupación en la comunidad.
Esta medida no solo implica la pérdida de empleo para un centenar de personas, sino también un grave problema para los miles de afiliados que dependían de este centro de salud para su atención médica. La falta de información sobre a qué instituciones deberán acudir a partir de ahora genera angustia y temor entre los beneficiarios.
Desde el Hospital Militar, aseguran que PAMI Salta no ha dado ninguna respuesta ni explicación sobre esta drástica decisión. Este hermetismo agrava aún más la incertidumbre y el desconcierto en torno a una medida que afecta a miles de personas y pone en crisis un sistema de atención que, hasta ahora, funcionaba con normalidad.
Ante esta situación, se exige una pronta respuesta por parte de las autoridades del PAMI para garantizar la continuidad de la atención médica de los afiliados y evitar mayores perjuicios a los trabajadores afectados. Es fundamental que se establezca un plan alternativo y se brinde información clara y precisa a todos los involucrados para minimizar el impacto de esta desafortunada decisión.