El gobernador bonaerense se refirió a la “proscripción” respecto a la figura de la ex viecepresidenta y expresó que el Poder Judicial “está actuando como un partido político”. “Nuestro absoluto acompañamiento está con la víctima que es Cristina”, aseguró.
El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, se refirió a la condena que Cristina Fernández de Kirchner recibirá por “corrupción” en la realización de obras públicas viales en Santa Cruz y remarcó que la Justicia utilizó “un derecho fantasía” y montó “una ficción” donde “no hay una sola prueba” en contra de la ex vicepresidenta y se la acusa de “un delito que no existió”.
Según Kicillof, es una especie de “aleccionamiento” para quienes quieran llevar adelante ciertas políticas populares, con el propósito de ensuciar su figura y, en este caso, con el agravante de prohibir el desempeño de cargos públicos, “donde está claro que lo que hay es una proscripción“.
Junto a la vicegobernadora, Verónica Magario; el ministro de Gobierno, Carlos Bianco; el titular de Obras Públicas, Gabriel Katopodis; y el ministro de Justicia y Derechos Humanos bonaerense Juan Martín Mena; el mandatario provincial señaló que “no hubo sobreprecio en las obras de Santa Cruz” y que “no hay ninguna sin terminar”.
Paralelamente sostuvo que “nunca pudo haber cometido ese ilícito sencillamente por la función que tenía; ella no era la encargada de tomar esas decisiones” y que quienes sí habían podido tomarlas “jamás fueron investigados”.