El pasado 18 de mayo un grupo de montañistas catamarqueños emprendieron una expedición y alcanzaron la cumbre del volcán Cerro Negro de la Laguna Verde. Mediante un gesto simbólico impusieron el nombre de “Universidad Nacional de Catamarca”, en homenaje a la institución, al pico alcanzado.
El Rector, ingeniero Oscar Arellano, reconoció a los montañistas catamarqueños, y mediante un acto realizó la entrega de distinciones a Úrsula Ornella Díaz y Aldo Jesús Leiva, quienes protagonizaron el ascenso, y a Ricardo Marcelo Berlanda y Sergio Gustavo Tomsic, integrantes del equipo de apoyo.
Arellano estuvo acompañado por la vicerrectora, doctora Elina Azucena Silvera de Buenader, quien participó de la entrega de certificados.
Desde la UNCA se destacó que este acto representa mucho más que un logro deportivo. Se trata de un gesto de profundo compromiso con la identidad catamarqueña, que refuerza los vínculos entre la Universidad y el territorio, y promueve valores como el esfuerzo colectivo, el conocimiento del entorno y la valoración del patrimonio natural.
La cumbre alcanzada, ahora bautizada como “Cumbre UNCA”, se ubica a 5.764 metros sobre el nivel del mar y forma parte del macizo del volcán Cerro Negro de la Laguna Verde, una de las formaciones volcánicas más relevantes de la Cordillera Frontal catamarqueña. El ascenso implicó varios días de aclimatación, travesía y trabajo en equipo en condiciones de alta montaña.
El Intendente de Fiambalá, Raúl Usqueda destacó el trabajo conjunto que vienen realizando con la UNCA desde el año pasado “desde la UNCA también se brindó la oportunidad a muchos jóvenes de diplomarse en esta actividad de alta montaña, y este es un paso más. Tenemos en la cordillera de Fiambalá a la Universidad Nacional de Catamarca en este cerro”, expresó y agradeció al Rector por “el trabajo realizado generando oportunidades para los jóvenes de toda la provincia”. Del acto participaron Secretarios y Decanos.
