La vicepresidenta Victoria Villarruel llegaría mañana a Tucumán para participar de una actividad oficial en la Casa Histórica, en el marco de los actos por un nuevo aniversario de la Declaración de la Independencia. Hasta el momento, no se confirmaron detalles de su agenda ni la participación del Gobierno de la Provincia en el evento.
Las relaciones entre Villarruel y el presidente Javier Milei no mejoraron en el último año y eso se ve reflejado también en los actos patrios: no coincidirán en Tucumán. Desde diferencias estratégicas surgidas durante la campaña electoral hasta evidentes desencuentros en la gestión, el vínculo entre la Casa Rosada y el Senado se vio marcado por desconfianzas y cortocircuitos.
Anteriormente, senadores cercanos a Villarruel señalaron a Karina Milei, hermana del presidente, y a Santiago Caputo, influyente asesor, como figuras clave en el distanciamiento. Acusan a este “triángulo de hierro” de ser el principal filtro de las decisiones gubernamentales y de alimentar la desconfianza hacia la vicepresidenta.
Antecedentes y rupturas
La tensión no es nueva. Ya en marzo de 2024, Villarruel había admitido públicamente su desacuerdo con Karina Milei, describiendo a Javier como un “pobre jamoncito” atrapado entre ambas. La controversia posterior al canto racista de jugadores de la selección argentina en Francia, donde Milei defendió públicamente a su hermana, profundizó aún más la fractura.
El resultado es una relación política virtualmente quebrada entre el Senado y la Casa Rosada. Se rumorea que Villarruel tampoco mantiene una comunicación fluida con el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, encargado de evaluar la gestión de los ministros. Su ausencia en la última reunión de gabinete en Casa de Gobierno no hizo más que alimentar estas especulaciones.
