Marcos Rojo, Cristian Lema y Marcelo Saracchi fueron apartados del plantel profesional de Boca Juniors y quedaron a un paso de dejar la institución. La determinación fue tomada por el director técnico Miguel Ángel Russo, aunque los jugadores no fueron notificados de manera directa por él.
Según trascendió, la comunicación estuvo a cargo de un ayudante del cuerpo técnico, quien les informó la decisión una vez que se presentaron al entrenamiento en el Predio de Ezeiza. Los tres futbolistas se sorprendieron al conocer la noticia en el mismo lugar de trabajo, lo que generó un fuerte impacto puertas adentro del plantel.

Situación contractual dispar
Tanto Rojo como Lema tienen vínculo contractual con el club hasta diciembre de este año. En cambio, Saracchi posee un contrato vigente con Boca hasta fines del 2028, lo que podría complicar una eventual desvinculación o reubicación.

La situación generó incertidumbre no solo entre los jugadores implicados, sino también en el resto del plantel, en medio de una etapa cargada de tensión interna. Este tipo de decisiones suelen leerse como parte de un proceso de reestructuración o depuración en contextos de crisis, aunque aún no hubo una comunicación oficial por parte de la dirigencia.
El club atraviesa un momento deportivo crítico: acumula 11 partidos sin ganar, lo que representa la peor racha sin victorias en la historia de la institución.

El clima en el vestuario es cada vez más tenso y la presión sobre el cuerpo técnico y la dirigencia se multiplica con el correr de los días. Con un plantel golpeado y señales de ruptura interna, Boca se enfrenta a un desafío urgente para reencauzar el rumbo en medio de un semestre decisivo.