El abogado Jorge Monastersky presentó una denuncia penal para que un juez Federal identifique a quién se refirió el Sumo Pontífice, que en términos jurídicos, es el jefe de otro Estado.
Monastersky quiere que Bergoglio declare como testigo sobre su denuncia del viernes, según la cual un ministro le pidió una coima a un empresario.
Esta tarde, en diálogo con Radio Continental, el abogado explicó que “en la presentación judicial menciono que existe un delito que se llama cohecho, cohecho activo y cohecho pasivo, que es la persona que pide lo que conoce la gente, ya sea por sí o por tercero, es una coima, y quien la recibe. Ahora bien, olvidémonos quién es Francisco, que era cardenal de Buenos Aires, estamos hablando del jefe de la Ciudad Vaticano, de la cantidad de repercusiones que tienen sus dichos en el mundo, entonces que manifieste un hecho de corrupción directamente, no es que yo entienda directamente que hable de un pedido de coima, es un hecho de corrupción y de un delito”.
El letrado aclaró: “No dijo si es de este gobierno o de un gobierno anterior, porque también hay que decirlo eso, pero sí habló de un hecho de corrupción. ¿Y qué es lo que me parece grave? Me parece que es un daño para el país enorme, los dichos. Porque Argentina si hay algo que no tiene es buena fama, de cumplimiento, de garantías, de seguridad jurídica, entonces, que una persona de tanta trascendencia a nivel internacional lo diga, da por cierto lo que dice. Entonces, ¿quién va a querer venir a invertir en un país donde te piden coimas, dicho por la autoridad, ni más ni menos que el Papa Francisco?”
Monastersky consideró que la gravedad radica en que el papa Francisco “no habló de un rumor, él dijo que se lo contó el empresario. Él dijo directamente, por eso me parece grave, porque él no dijo “yo creo, me cuentan, pareciera”, él habló de un hecho de corrupción. Estaba un emprendedor internacional, dijo. El solo hecho de pedir un dinero para tener un beneficio, estando por intermedio de la firma de un funcionario, de un ministro, creo que dijo, o su secretario, estamos hablando de un delito. Entonces, a mí me parece, la justicia tiene que investigar qué hay detrás de esto, sea verdad o sea mentira, por la trascendencia que tiene quien lo dice.”
Finalmente, el abogado Jorge Monastersky consideró que Bergoglio “se introdujo en cuestiones internas, aunque parezca raro, él se metió en cosas internas de otro país, porque él es el jefe de Estado del Vaticano, entonces ya que habló, yo desearía que aporte información si tiene voluntad de esclarecer estos hechos que repudiamos desde siempre, que se contacte con el juzgado y que diga que va a aportar la información necesaria. No nos olvidemos que al Papa Francisco lo escuchan y lo siguen del mundo. Esto es grave. Sea verdad, sea mentira.”