Cansado de no obtener respuestas por parte de la Justicia, Miguel Ángel Vallejo, un vecino afectado, denunció públicamente que un pastor evangélico y ex policía le habría usurpado su casa desde hace más de 15 años. Aunque el caso fue judicializado y la Justicia de Santiago del Estero falló a su favor, Vallejo asegura que nunca logró recuperar su propiedad y actualmente vive en una pieza prestada. “Gané el juicio y la Justicia no los sacó. Los falsos profetas siguen como si nada, adentro de mi casa”, expresó con indignación.
Según relató a este medio, todo comenzó en 2005, cuando su ex pareja habría falsificado su firma y vendido la casa —que él había adquirido legalmente en agosto de 1998— a Javier Belizán, a quien señala como pastor, ex policía y líder de una banda delictiva conocida como “Pinocho”. Belizán cuenta con un amplio prontuario que incluye causas por secuestros, robos a viviendas y piratería del asfalto.
Pese a que la Justicia le dio la razón, Vallejo denuncia que las autoridades nunca ejecutaron el desalojo, y que el acusado sigue habitando la propiedad de manera ilegal, sin consecuencias legales.
“En ese entonces me desalojaron, me quedó todo adentro, los muebles, y la ropa, perdí todo”, expresó Vallejo. Aún así, pese a que Miguel Ángel se quedó sin un lugar para vivir, llevó el caso a la Justicia.
“Empecé con lo judicial, seguí con lo civil, me presenté en Asuntos Internos en la Policía de la provincia de Buenos Aires”, manifestó.
En el 2010, los supuestos dueños le vendieron la casa al pastor evangelista con un boleto de compra venta debido a que en ese entonces la casa no estaba escriturada.