El fuego aumentó durante el fin de semana por las condiciones climáticas. Hay alerta por la proximidad con zonas habitadas.
Ya son cinco los focos activos del siniestro forestal que crece por el fuerte viento y los bomberos voluntarios de Andalgalá no dan abasto.
El sábado, un relevó la situación y el domingo los bomberos fueron al lugar.
El intenso viento reactivó las llamas que llegaron hasta la cumbre y temen que luego baje hacia el puesto de una familia que vive cerca de ese sector.