Eel Tribunal Oral Federal (TOF), tiene previsto para hoy jueves dar inicio a la causa que tendrá en el banquillo de los acusados al ex juez de la Cámara de Apelaciones en lo Penal y de Exhortos Juan Pablo Morales junto a otras nueve personas.
Están acusados de integrar una organización que se dedicaba a la distribución y comercialización de estupefacientes.
La organización se dedicaba a la distribución y comercialización de drogas en distintos puntos de la provincia. Las escuchas telefónicas, junto con otras pruebas como testimonios y documentos incautados, serán presentadas ante el tribunal.
Morales junto con Roque “La Bestia” Vizcarra, Marcos Soruco y Ramón “Carocín” Baigorrí son los supuestos “coautores del delito de comercialización de estupefacientes, agravado por el número de intervinientes”, mientras que Marco Rearte, Domingo Sebastián “La Chancha” Frías y su hermano Pablo “Piquinino” Frías fueron imputados como presuntos “coautores del delito de tenencia de estupefacientes con fines de comercialización, agravado por el número de intervinientes”. Los otros sospechosos, Gabriel Lazarte y Emilse Aráoz, deberán responder como supuestos “coautores del delito de confabulación de dos o más personas”.
Todo comenzó en julio de 2021, cuando el Grupo de la Unidad de Cibernarcocriminalidad de la Gendarmería Nacional interceptó comunicaciones telefónicas que revelaron las operaciones ilícitas de la banda.
Las detenciones y los secuestros fueron el resultado de tareas de investigación realizada por efectivos de la Agrupación VIII y el Escuadrón de Operaciones Antidrogas de Gendarmería Nacional. En la pesquisa trabajó personal de la Unidad de Investigación de Delitos Complejos y Procedimientos Judiciales con el apoyo personal del Escuadrón Núcleo, de la Unidad de Reunión de Información “Catamarca”, Unidad de Criminalística y Estudios Forenses. Se llevó a cabo un total de cinco registros en viviendas ubicadas en la Capital provincial.
Morales fue llamado a indagatoria en noviembre de 2021 por el fiscal Santos Reynoso; al mes siguiente el juez Miguel Contreras dictó la falta de mérito tras advertirse un error en la transcripción de una palabra mencionada por Morales y que había quedado registrada en las escuchas telefónicas.
En diciembre de ese año, Contreras dictó la falta de mérito. Esta medida fue apelada en conjunto por los fiscales Rafael Vehils Ruiz, Santos Reynoso y el titular de la Procuración de la Narcocriminalidad, Diego Iglesias. El Tribunal de Alzada Federal hizo lugar al planteo.
El Tribunal de Alzada consideró que “existen elementos suficientes como para considerar factible la participación del encartado Morales en las maniobras relacionadas con el tráfico de estupefacientes. (…) resulta que había un trato fluido entre Morales y los demás procesados (principalmente Marco Rearte), quienes asiduamente asistían a su estudio”.
También mencionan como pruebas las intervenciones telefónicas y la declaración de “La Chancha” Frías como “imputado colaborador”.