Un trágico episodio conmocionó a la ciudad de Embarcación, donde un niño salteño de 8 años perdió la vida tras broncoaspirarse mientras comía mortadela. El hecho ocurrió en la casa de un familiar, donde el menor compartía la merienda con otros niños.
Según relataron testigos, el pequeño salteño comenzó a tener dificultades para respirar mientras ingería un trozo de mortadela. A pesar de los intentos desesperados por auxiliarlo, el menor no pudo ser reanimado y falleció en el lugar, generando una profunda consternación en la comunidad.
El caso se encuentra bajo investigación para determinar con precisión las circunstancias del hecho. Autoridades sanitarias insisten en la importancia de conocer maniobras de primeros auxilios para actuar rápidamente en casos de asfixia por alimentos, especialmente en niños pequeños.