Bolivia construyó una fortaleza en el estadio Municipal Villa Ingenio. El conjunto del altiplano se hace fuerte de local y en su compromiso ante Paraguay, correspondiente a la fecha 12 de las Eliminatorias Sudamericanas rumbo al Mundial del 2026 volvió a demostrar que el seleccionado de Óscar Villegas es un equipo con altura.
Es que Ervin Vaca, a los 15 minutos de iniciado el espectáculo, abrió el marcador en El Alto, pero Miguel Almirón marcó la igualdad para la Albirroja en el complemento. El cazador de utopías imposibles parecía lograr una nueva hazaña en territorio ajeno, pero una preciosa pared construida entre Lucas Chávez y Luis Haquín desarticuló a la última línea guaraní y provocó la polémica de la tarde.
En un desesperado intento por desactivar el peligro, Gustavo Gómez se arrojó al piso y el delantero cayó dentro del área. Fue entonces cuando el árbitro Andrés Matonte sancionó la pena máxima y le dio la posibilidad a Miguel Terceros de sellar el 2 a 1 a favor del dueño de casa. En tiempos de VAR, revisiones y miradas desde todos los ángulos, llamó la atención que las autoridades hayan mantenido el fallo del colegiado.
De todos modos, los conducidos por Gustavo Alfaro, que venían de dar el batacazo en Asunción tras vencer a la Argentina, rescataron un empate en el minuto 90, cuando Julio Enciso improvisó una magnífica obra individual que silenció al escenario boliviano cuando le puso cifras definitivas al 2 a 2 que se celebró como una victoria. Una amenaza que se concretó después de varias ocasiones que habían llegado con un remate de Miguel Almirón que contuvo el arquero Guillermo Viscarra y un cabezazo de Matías Galarza que se fue desviado.
