Con goles de Nicolás Laméndola y Elías Torres, el Tiburón derrotó 2-0 al Ciruja y se quedó con el primer ascenso. Las imágenes de la gesta del combinado de Mar del Plata.
El mítico Gigante de Arrotito, que supo albergar a la Copa del Mundo que se disputó en 1978 y fue escenario de la recordada goleada de Argentina ante Perú por 6 a 0, se volvió a vestir de gala para resolver el primer Ascenso al fútbol grande nacional. Es que San Martín de Tucumán y Aldosivi se vieron las caras en Rosario, en un duelo que resolvió al campeón de la Segunda División.
De un lado, la marea roja y blanca con más de 20.000 personas del Ciruja colmó todas las localidades que tenía a disposición; mientras que en las tribunas de enfrente, poco más de 10.000 fanáticos llegaron con la esperanza verde y amarilla con la ilusión de dar el golpe. Los del norte recorrieron más de 900 kilómetros para apoyar a su equipo, en tanto que los marplatenses tuvieron que trasladarse 700 km para bancar al Tiburón.
Lejos de los que marcaban los pronósticos, el conjunto liderado por Andrés Yllana intentó imponer condiciones con un juego vertiginoso a cargo de Juan Sills, Agustin Colazo y Rodrigo González. Y el espectáculo se desarrollaba cerca de la zona defendida por Darío Sand. Por lo tanto, antes de que el cronómetro de Yael Falcón Pérez llegara al primer cuarto de hora, los de La Feliz festejaron el 1 a 0 gracias a una notable jugada colectiva. El preciso centro de Ignacio Guerrico por el sector izquierdo fue capitalizado por Nicolás Laméndola, quien logró anticipar a toda la defensa tucumana y tocó con suavidad contra un palo. La pelota besó el poste derecho del arquero e ingresó con suspenso para que el grito se escuche hasta la ciudad balnearia.
La notable producción de Elías Torres le permitió a Laméndola estirar la ventaja, pero la definición por encima de Sand no fue del todo efectiva y Lucas Diarte desactivó el peligro con un violento rechace a las tribunas. Aldosivi mostraba un planteo inteligente para lastimar a un Ciruja que parecía estar desbordado por el contexto emocional.
De todos modos, el Santo reaccionó a través de la vía aérea. En un descuido defensivo del Tiburón, Gustavo Abregú ingresó por el segundo palo en soledad y sacó un frentazo potente que exigió a Jorge Carranza. El lamento colectivo se instaló cuando Juan Orellana no logró aprovechar el rebote que dio el arquero, al concluir la escena con un remate desviado. Fue una muestra de carácter para el elenco liderado por Diego Flores.
Antes de que los protagonistas se fueran al descanso, la figura de la tarde conmovió al pueblo de Mar del Plata con una obra magistral que derivó en el 2 a 0. Desde su propio campo, en la mitad de la cancha, Elías Torres se sacó de encima a Agustín Dattola y encaró a Juan Orellana. A pura gambeta y velocidad, el héroe de la tarde fue para un lado y para el otro, antes de sacar un misil dirigido al ángulo más lejano de Sand. Un golazo para que Aldosivi alimente el sueño de volver a Primera.
En el complemento San Martín de Tucumán hizo los méritos para llegar al descuento, pero Carranza evitó el tanto tucumano. Una gran intervención de Nicolás Moreno le dio la chance a Junior Arias de marcar, pero el experimentado arquero volvió a exponer su jerarquía para ahogarle el gol al uruguayo. Para esas alturas, El Traductor ya había enviado a la cancha a Pablo Hernández y Gonzalo Rodríguez para tener más opciones en el ataque.
Con mucho sacrificio, Aldosivi logró concretar su regreso al fútbol grande de la Argentina. Como ocurrió en 2018, la entidad de Mar del Plata volverá a la máxima competición nacional. El primer ascenso se lo llevó El Tiburón. El pueblo que se tiñó de verde y amarillo tendrá una caravana soñada hasta La Feliz. “Que la cuenten como quieran”…
